martes, 2 de septiembre de 2008

no me gustan los hombres correctos

Quizá no me gustan los hombres correctos (que conste que la palabra "correctos" no la elegí yo...pero no encontré una mejor). Aparecen en un bar cuando lo que uno menos buca es alguien con quien platicar..y menos de amores, traiciones, que si todavía lo querés, que todavía duele..¡Ay, que casi somos almas gemelas! Y quieren hacer las cosas bien e invitarte a comer un día para platicar, saber si viven cerca, si coinciden sus horarios de trabajo ..¡qué estrés!
Algo debe estar mal, pues al verse tan correctos, pierden el encanto, puff! se transforman en sapos y uno ahí esperando que comience a llover, que alguien te llame al celular o que suceda cualquier cosa para ponerle fin a la conversación.
Pero si hubiera sido un hombre que me pregunte el nombre solo por compromiso, a quien no le importe si tengo novio o terminé ayer con él, que ni se moleste en preguntar si trabajo, si estudio, si vivo cerca o lejos...ahí estaría feliz! El fulano estaría irresistible, guapo, interesante...ay, quisiera hacer mi vida con él...hasta eso. Y la vida será ese rondó perpetuo..

0 comentarios: